viernes, mayo 28, 2004

Finalmente pudo iniciar un proceso de escritura. Ajeno, como se había sentido siempre en la ciudad acudió al lugar común. Había olvidado el sentido mismo de la escritura, su feeling inmemorial. Esto databa de varios días. Esta impresión que lo devoraba. Podía caminar por las calles para borrar el malestar que lo aquejaba.
Lo aquejaba una sensación de bailongo, una cruda ingenua como chocomilk de domingo al mediodía. El sólo buscaba ser un escritor —me choca: un ecrivain— y había terminado en poeta de cantina, un género que no lo apartaba de los lujos de la vanidad. Y su alma estaba ansiosa. De nuevo el ejemplo, estaba descoordinado: su cabeza viajaba por un lado, su cuerpo marchaba por allá y su alma, un vertedero de toxinas y escuchó a Olivia Newton John, y recordó el Glass Houses de Billy Joel —su primer álbum, sí el primero— ¿No se estaba engañando con un chacha cha rudo y escueto? Con ese turbio elogio, con esa sensación inoportuna de ser el único y el mejor pasado posible. Sin duda alguna había sido un arrebato. La posibilidad de reconstruir el pasado lo había seducido.
“En cinco minutos cierro”. Buscó un modo, una estructura, un placer en colocar un punto final a ese párrafo, una vez que había encallado, de nuevo, en la orilla de la escritura.


viernes, mayo 21, 2004

Mis links


http://www.ai.mit.edu/people/jcma/papers/1986-ai-memo-871/memo.html

Ensayo sobre el desarrollo de la hermeútica y cómo los modelos contribuyen a la IA.



http://www.futurechurch.org.nz/article.php?article_id=144

Articulo sobre cómo romper la monotonía en los cultos.

http://lcweb2.loc.gov/ammem/arendthtml/special.html

Ensayos introductorios sobre Hannah Arendt



http://www.jesuit.ie/prayer/ej040407.htm

Sitio jesuita de oración. Oraciones guiadas.



http://www.childrenatworship.org/beliefs.html

website anglicano sobre liturgia para niños. Tratan de colocar a los niños en el centro de la liturgia para evitar que crean que la clase de escuela biblica dominical es sólo para entretenerlos.



http://www.futurechurch.org.nz/links.htm#alt.worship

Sitio sobre alternative workship





http://ibergestion_cultural.cnart.mx/index_progaca.html

Link de diplomado en gestion cultural.

suena interesante...







http://www.motorola.com/softmodem/public_download/Universal/Windows_WDM_6.02.13_WME_DFV.zip

para bajar el controlador del modem de la casa



Links Baptists...

http://perso.club-internet.fr/castelg/ (sitio web teologia protestante en FR)

http://www.bpfna.org/pcongre01.html

http://www.oldcambridgebaptist.org/related_sites.htm

http://www.abc-usa.org/identity/index.html

http://www.tcpc.org/resources/links.html#publications





http://www.kadampa.org/readings.htm Budismo kadampa

http://www.tharpa.com/spbooks.htm#mm

http://www.theologicalstudies.org/ces/

http://www.barna.org/cgi-bin/home.asp

/www.unored.com/ (Puerto Rico. cristianismo)

http://www.ishaah.com/flash/friends4life.cfm tarjetitas bonitas



http://www.heartofworship.com/

http://www.charliehall.com/flash.php grupo de rock gospel

http://www.theory.org.uk/ Excelente pagina sobre media theory. deriva en quuer studies de judy butler, ademas trae links a introducciones a Foucault y Giddens

http://www.henciclopedia.org.uy/autores/Remedi/ciudadletrada.htm Rama angel

http://www.unisinos.br/ Universidad brasileña jesuita unisinos doctorado en historia



Links Cognitivos:

http://philosophy.thereitis.org/courses/mindmach curso sobre ciencias cognitivas tiene links a textos sober AI



Capacitación teológica ecuménica

http://www.isedet.edu.ar/

Centro de investigaciones políticas e investigación social comunitaria

http://www.ciepac.org



----

Name: David Brondos
Position: Academic Dean Theological Community of Mexico
Email: davidbrondos@prodigy.net.mx

--

Teología feminista:::

Ponencia light de Rmontemayor sobre teologia feminista http://sitioabm.org/2001_rebecamontemayor.htm

texto anecdótico y doctrinal sobre la discriminación de las mujeres de Salatiel Palomino pastor presbi

http://www.warc.ch/dp/rw9912/04.html

texto de montemayor sobre ecumenismo

http://www.laneta.apc.org/cencos/09iglesi/Revista13.htm

Nota de la jornada de sobre la ordenación de Rebeca Montemayor

http://www.jornada.unam.mx/2000/abr00/000423/mas-santa.html

Página de Barbara Andrade-Teologa uiamx

http://www.st-georgen.uni-frankfurt.de/bibliogr/andrade.htm



Historia de iglesia desde la perspectiva del pobre.

http://home.earthlink.net/~cehila/

Comunidad de educación teológica ecuménica latinoamericana caribeña

http://www.est.com.br/cetela/

World Alliance of Reformed Churches

http://www.warc.ch/



http://www.colciencias.gov.co/seiaal/congreso/Ponen6/SERRANO.htm

Ponencia "Cuerpos construidos para el espectáculo"

A TEOLOGIA QUE SAI DO ARMÁRIO[1]: UM DEPOIMENTO TEOLÓGICO

http://www.est.com.br/cetela/id67.htm


André Sidnei Musskopf



frase cachonda

ecclesia semper reformanda

Día de la Reforma, el 31 de Oct

Feminismo:

http://www.feminista.com

http://www.cimacnoticias.com/ agencia de noticias sobre feminismo

http://www.genderforum.uni-koeln.de/ página pk madre sobre feminismo

http://www.cimac.org.mx/portada.html

http://www.lolapress.org/

http://www.library.wisc.edu/libraries/WomensStudies/core/crmex.htm

http://www.feminist.org/arts/intro.asp

http://www.wedo.org/

Links chingones de la novela 1984

http://www.gerenser.com/1984/bio.html

http://www.gerenser.com/forums/index.php?act=ST&f=2&t=477&s=275fb1b922dd5fb3aa906886ba55d346



Ojo: hay una cancion de Radiohead 2+2=5 y otra de Eurhytmics llamada

"For The Love Of Big Brother" and is by the Eurythmics

que està en el Soundtrack del Film

http://www.donkboy.com/html/tracert.htm link sobre traceroute

Ojo: Ensayo de Karl Jaspers sobre Nietzche y el cristianismo

http://www.ldiogenes.buap.mx/ligas/Nietzsche%20y%20el%20cristianismo%20-%20Karl%20Jaspers%20(cris).pdf

puedes entrar por www.ldiogenes.buap.mx

www.elaleph.com Libros bajables y leibles como pdf

www.hebus.com

Pagina de wallpapers


Borrador de ensayo sobre Diaz Miron que envió Pepe Cabada ()

Salvador Díaz Mirón

La retórica del silencio

1.En manos del crítico

La primera parte y objetivo del ensayo sería: captar las razones del silencio en la labor poética de Salvador Díaz Mirón, después de la publicación de su libro “Lascas”, y hacerlo mediante la crítica establecida por Jorge Cuesta.
El lograr tal empresa: acercarse a los significados del sentido dado por el elocuente silencio, que se procura un poeta forzado por circunstancias ajenas a su emoción y las cuales pertenecen a la esfera de la razón y del rigor de la forma.
Se debe de centrar en el acontecimiento suscitado por acercarse a un primer análisis de la obra poética de un autor, para entender la desmesura del ansía y el desasosiego, que después de un libro, atrapa y convive su destino con otro conocimiento.
Para aceptar en la interpretación de su esfuerzo por sostener el silencio de su obra, el logro para concebir su futuro con los argumentos, que fijan el alcance de la apuesta hecha a la posteridad por el poeta del puerto de Veracruz.
El silencio poético de Díaz Mirón, si se entiende como la expresión de la retórica, para la acepción aristotélica, sirve para discernir las circunstancias dadas a lo que es admisiblemente creíble, pero también, en lo que dice todo pero a la vez lo niega sin concesión, para caer en la ambigüedad del carácter de su despego de lo que le es natural.
Mas, se exilia y destierra de la consideración del gremio.
Por eso, si se adentra la mirada en la poesía de la última etapa de Díaz Mirón, surge la aseveración de un silencio cultivado y en donde la forma se constituye en la entraña más profunda de su saber, y del contenido moldeado en un vació, que sólo se concluye en el alegato a su abierta negación a expresar asuntos, que son de la mayor consideración para la sociedad.
Es en la forma poética de Díaz Mirón donde se contiene una manera de concebir la totalidad, la que nunca se expresa por la emoción, sino que se busca en un interés sin desmayo en el tiempo para que se encarne en la poesía.
Ya que el contenido admirado, necesita ceñirse a la actividad desarrollada por la razón, que produce, inventa y arma formas inéditas, ajenas a la expresión inmediata y al entendimiento fortuito.
De ahí, que sea necesario admitir una amplia delimitación en el alcance del sujeto y su escritura. Esto es, de la irrupción de su vida privada en la escritura. Y de las razones de ese objeto poético para evitar absorber la vida íntima y sicológica del autor.


2. La delimitación del autor

Las palabras con las cuales se inicia el artículo de Jorge Cuesta sobre Salvador Díaz Mirón, titulado así con su nombre y publicado en el mes de enero de 1940 en el periódico de la Ciudad de México Noticias gráficas; se adelanta a la crónica del fin de un itinerario personal para mostrar en el autor del propio ensayo, la consecuencia del compartir el ideal estético con el cual interpreta la obra del poeta jarocho, pero también, de la celebratoria de un futuro muy personal: He tratado, pues, con la mayor atención todo lo que me dijeron en contra las ofuscaciones de su obra, sus desfallecimientos, lo mismo los estéticos que los morales, y las nubes que señalan su vida. pag 337.
Ya que con este criterio, el crítico cordobés, se adelanta al juicio de la posteridad y proporciona la herramienta de su análisis, del cual es consciente durante aquellos, los últimos años de lucidez de su vida, cuando escribe el artículo de la pertinencia del silencio a que posteriormente también él se destinara, pero será en él con otro tipo de locura: la muerte por propia mano.
Esta reconstrucción adelantada para constituirse en autor con los parámetros establecidos para su paisano Díaz Mirón, es la exigencia que establece para ser mirado por la futura crítica, a su labor de ensayos y de poesía escritos para ese porvenir.
Es en esa mirada que se adelanta a la crítica, que presupone un estímulo de una mirada en el vació del otro, de lo que sólo puede ser captado por la poesía, pero también, es la perdición en la fascinación de la nada que propone una experiencia común: locura.
Pero la crítica adelanta un principio, otro atisbo más a esa delimitación de las emociones personales y que podrían ser turnadas a la crítica literaria, cuando Cuesta previene, que su inicial falta de interés en la obra de Díaz Mirón, sea trasformando con el tiempo en una verdadera pasión por desentrañar eso que advierte: la perfección de una forma.
Y es el momento cuando logra desdeñar a los contenidos y darnos el vació para su conjunción moldeable con la forma, y para lograr mantenerlos en una estructura, que de por sí sola se alimenta y representa el feroz abismo1 donde sucumbe la mirada del lector.
Y es que para Díaz Mirón el contenido de su poesía más que en otro poeta, se va desdibujando, pero también, si en un principio se exigía su presencia y el interés de la mirada por tornar a lo incomprensible por los medios que son naturales, va descubriendo esa otra faceta de la totalidad, que ya no necesita recursos, es autosuficiente para proporcionarnos la clave de una melodía perfecta, aislándonos en la contemplación de la belleza.
Es en la forma que lo contiene todo, sin importar su contenido, tal es, lo que parece presumir esa poesía de “Lascas”. El ceñir se adquiere con la profundidad, que la mirada solicita la seña para avizorar a la razón creadora.
Y ceñido el contenido, no requiere otra explicación, porque su traje se adapta a su requerimiento, al igual que el poeta de los “Contemporáneos”: José Gorostiza, solicita al agua su capacidad de metamorfosis, en el extenso poema de “Muerte sin fin”.
Pero el silencio poético que aparece en los poetas de los más dotados, es un hecho, que puede tomar diversos caminos y expresiones, ya que se repite en ciertos personajes claves de la literatura universal: Arthur Rimbaud, huye fuera del ámbito donde desarrolla su poesía para la aventura a lo desconocido, lo que no deja de constituir un suicido por el extrañamiento y la exclusión a la que se somete en medio del continente africano durante aquellos años.
Porque es en la celebración de la distancia con la cual se debe de juzgar a un poeta, fuera de las calamidades del sujeto, donde ya sólo el autor fija un rumbo y rigor adecuado, para puntualizar la dirección de la atención de la mirada a los textos propuestos por un nivel objetivo e intencional.
Y es en ese rencor del sujeto del cual se previene Cuesta en su crítica, producto de la reserva y las limitaciones de las que siempre se advirtió en la obra de Díaz Mirón, que lo condujeron con el tiempo a desentrañar el verdadero motivo, de su ya abierto y conciente resentimiento creador y fuente perenne de su interés por el misterio de la obra de arte.
Aunque la independencia crítica es el objetivo por el cual Cuesta lucha desde la profecía racional e intelectual de la tendencia humana más básica, la que durante la historia de la humanidad: la razón, revoluciona a la naturaleza, cambiándola, renaciéndola.
Y es en la figura del poeta Salvador Díaz Mirón para la literatura mexicana moderna, esto es, en su consecuencia para el siglo XX, donde se permite comenzar a reconocer esa apreciación de una ausencia forzada por la imposibilidad misma de la tendencia humana para lograr atrapar a la esencia.
Y es que, desde el principio de los tiempos de la reflexión, no estaban dadas las condiciones para el conocimiento poético por los caminos comunes, porque no es dentro de los ámbitos del conocimiento de origen platónico donde se debe de apreciar a la poesía, sino que es desde el soplo de la divinidad, de su lejanía con los hombres, y que, con el tiempo y el esfuerzo de su penetración adquirió el nombre de estética.
Pero, por qué ese silencio, ¿por qué la lucha para obtener la forma? Que conduce al más profundo exilio, y, por qué, beber el desarraigo de las formas finitas. Y no aceptar en el interior de su vocación, el contenido de una expresión sin esfuerzo, tal y como se ofrece la expresión romántica a su autor, en el arrebato irracional.
A veces el dicho del poeta en cuestión, representa un desprecio antinatural a la muerte, tanto en su vida personal como la vida de los demás, ya que esta, cuando compromete su honor, refleja la crueldad con la cual conduce su intencionalidad, en la falta de respeto a la vida humana en aras de la forma o de la imagen, siempre despechada por Platón, pero que designa el lugar constitutivo de la poesía.
Díaz Mirón se diferencia de sus coetáneos hacedores de poesía, por una pasión atormentada y la aventura con la que desgarra sus vestiduras poéticas, para atreverse a concluir con una forma y un honor ajeno, llevado, eso sí, al límite de la pertinencia social por la cultura mediterránea que nos forma.
El caso de Salvador Díaz Mirón es ejemplar para la medida de cualquier acceso a la discusión de las formas y los contenidos poéticos, ya que implica sostener con cuidado la separación de autor y creador, la del sujeto y el objeto de creación, donde su vida apasionada irrumpe a manifestarse con más fuerza y afuera de los limites considerados para los textos implicados en su análisis.
Porque es al crítico en segundo término, a quien le conviene mantener claramente delimitado su objeto, que le sirve de instrumento adecuado para no perturbar las frágiles crestas con las cuales abastecía su almacén poético el autor, más lleno de obviedad ante la forma perfecta, que de una palabra estimulante a la manera de Walt Witman y su canto americano.
Ya que se asume en la otra vertiente de la poesía universal, la francesa de Charles Baudelire y su corte, un conocimiento diabólico justificado por la mecánica poética del defenestrado poeta y narrador americano Edgar Allan Poe, quien se acerca a una rigurosa matemática con pretensiones proféticas y divinas para justificar su obra.
Este tipo acercamiento a la poesía de Díaz Mirón por parte de Cuesta, señala las obsesiones de este último por entrañar la influencia francesa en nuestra cultura, a las que califica de desarraigo de las fuentes locales e indica el punto de apoyo para celebrar la universalidad de nuestra cultura.
Esta apreciación le permite distinguir a una singularidad en la cultura: su desarraigo, por el aprecio a las formas ajenas, aún más que el propio idioma matricidio, para centrar su pertinencia a una condición antigua: la universalidad de las influencias y las tendencias de nuestra literatura.
Salvador Díaz Mirón poeta de un solo libro, según Cuesta: “Lascas”, ya que su anterior producción poética implicaba los riesgos de escribir con la facilidad natural de su emoción romántica, sin aceptar cortapisas o continente, sin ataduras, sólo con la ligereza para dejarse llevar por el gusto, que no devenía en la difícil práctica de una pasión atormentada con la correspondencia de la forma y el fondo, que lo hacía el poeta mas dotado de los románticos de la segunda mitad del siglo XIX en México.
Pero el abandono de esa facilidad poética, la que va unida a la naturaleza del individuo, y de la cual el romanticismo se sirve para producir sus obras, también es útil, para apreciar la dificultad de renunciar a su gusto, porque el verdadero interés de su arte se logra en el aparente desequilibrio con el contenido y la forma, para apresar una significación más profunda y abismal por su ausencia de raíces.
Ya que el preguntar: ¿para qué, cubrir el espacio de conceptos, si la forma previene una mayor profundidad de su acontecer en la tradición?
Esto es, si la forma logra expresar lo que el contenido no llega a delimitar, es por la vaguedad de una trascendencia inapresable e indefinida, a que es guiado el sujeto por una formación en la incomprensión de la poética, a lo que Cuesta intuye en otro orden, aún más allá de la separación impuesta por el origen reflexivo: A lo mejor, mi crimen tiene en mí las consecuencias fisiológicas más saludables. Pag 341.
Y en esta aclaración, bien se puede encontrar sus antecedentes en la filosofía de Spinosa y su meditación sobre la sabiduría del cuerpo, ya que: Nadie sabe lo que puede la fabrica del cuerpo.( leon flo ART).
Advertencia de una capacidad separada por el platonismo y el consiguiente desarrollo de la idea en Descartes, pero desmentida en la experiencia de la vida cotidiana de personajes, que no dejan todo en el tiro de dados.
Ante esta aclaración de las consecuencias de los actos considerados repugnantes para la sociedad pero benéficos para el individuo, y que muy bien, se pueden comparar a las propias faltas de la moralidad establecida para la estética, ya que mantiene para sus fines una actitud independiente de la ética sentida por los griegos o por la sociedad judío-cristiana.
Pero la forma es inapreciable, es una satisfacción, que va más allá de los sentidos y de la razón reconocida y admitida, ya que aparece por el rompimiento mismo de la norma social, a lo que Cuesta se pronuncia: Pues que la naturaleza del asunto sea indiferente para la belleza es un principio, en efecto, que no tarda en encontrarse con la moralidad de nuestros sentidos, la cual no concibe que el gusto pueda ser un fin suficiente del sentimiento. 319 .
Y puesto que, en ciertos individuos la salud individual no esta sujeta a las normas sociales, sino al egoísmo del individuo, a sus intereses. Para con la apertura de esta posibilidad no se descalifique el castigo a que debe de someterse para reparar la falta cometida por su desvío creador.
Es en el silencio infligido por el propio poeta a sus facultades naturales, a la ascética conformada en la cultura humana como la mayor virtud y el ejemplo de su logro más alto; donde acontece la implicación de una retórica con su contrario: el silencio, y este contemplarse como el castigo para el poeta que comete en crimen de eliminar al contenido para concebir la forma inédita con la razón
En tanto, para la anterior implicación se disciernen en las reglas el beneficio de su ausencia para la entidad poética, donde aparece la crónica del castigo, la expiación por el silencio a quien no sólo por especie, le es dada el habla como distinción indispensable, sino al poeta, que necesita más que otros de esa habla, y en la lucha por la razón y la coronación de esta, prefiere antes de perder, quedar recluido al silencio.
El silencio es una de las formas de la poesía para expresar una posibilidad y una potencia inédita de la razón por asaltar a la costumbre que constituye la razón primera del hombre: la palabra.
Y el silencio es un signo delegado a la sinrazón y a la locura, es una ausencia que la sociedad no soporta, pero también, es el saber que no necesita de expresiones públicas para lograr su más íntima satisfacción, el saber calla y envía a la ambigüedad a quien lo escucha.
Y es que desde el origen de la reflexión, se extrañan los tiempos idílicos con la percepción y la sensibilidad, para llegar a habitar a la diferencia representada en el pensamiento sustentado por Platón, como exclusión, pero no por el designo del no-ser, sino en la indefinición del camino seguido durante los siglos posteriores hasta llegar a la conciencia de su expulsión, ya sea por su ambigüedad o por su indefinición para alcanzar en su estilo de vida a las labores útiles para la sociedad.
Si en el inicio Platón los descalificaba por la multiplicidad de intereses y su nula aceptación a las reglas impuestas para controlar la producción de una sociedad, con las leyes de la racionalidad. Acontece en los tiempos actuales la misma situación, ejemplificada por Heidegger con el pensamiento calculador, que no tiene tiempo de reflexionar sobre sus actos.
Esto es, de lograr el entendimiento de las cosas por las razones establecidas y no por razones estéticas, las cuales no tenían cabida en el conocimiento de Platón, lo que no evita, su uso y despliegue en los diálogos que imitan a la facultad humana que trata de proteger: el logos.
Y el efecto fisiológico que alude Cuesta en el ensayo sobre el poeta originario del puerto; aparece el inicio de una reflexión más amplia sobre los actos y su castigo, de una culpabilidad asumida como conciencia para la sociedad occidental y de su efecto en la obra literaria.
Pero es donde se delimita perfectamente la propia mimesis de la razón de aparecer con sus leyes para limitarse así misma en un conocimiento, que eleva a la condición del desarraigo a lo que es admitido por el poeta para su poesía, y es en el efecto, una conducta y una norma personal.
Es en la separación de lo humano de la naturaleza, que le impone el conocimiento aceptado y propone fronteras para constreñirlo a su expresión, pero la suya, la del poeta considerada divina, por no tener explicación plausible; aparece el silencio de la exclusión y el de la comunicación con los demás.


3. Las formas del duelo

Representar las diversas maneras con las cuales Salvador Díaz Mirón vive en la conciencia el evento más singular de la experiencia del hombre: el duelo.
Y discernir ese desarraigo que implica habitarlo, desde su experiencia en la propia vida, a las diferentes acepciones que va tomando, con esa polisemia de sentido de las palabras que dan un carácter a la vida humana, pero las cuales lo conducen a la concreción de la certeza ineludible de la muerte.
Sea esta por la muerte del amigo o por la propia muerte. Pero vivir la expiación de la muerte intencional perpetuada por propia mano en el otro, en el duelo por limpiar el honor ofendido, por esa forma de la cultura recibida donde la conciencia individual es llevada a su máxima expresión de arraigo a la tierra, al nombre y a la identidad.
Pero, ¿“Lascas” es el testamento poético de Díaz Mirón? O es producto de ese duelo acaecido por la cercanía de la muerte del otro. Y el efecto de una sanidad a la que el silencio permite expiar la culpa del poeta.
Y en un artículo dedicado al poeta español León Felipe, Cuesta atrae a su reflexión la experiencia del duelo en la poesía de Díaz Mirón: “¿Qué grave duelo –dice otro poeta, Díaz mirón- rima en sollozo y enjoya el luto?”354
Esta alegoría para ensalzar lo que produce tristeza y zozobra en la existencia cotidiana y en la más profunda apertura psicológica, se remite a la nitidez con la cual los sentimientos toman su forma con el luto, y el duelo pasa a constituirse en la expresión de un dolor, tan grande, que sólo se puede expresar con el concepto kantiano de sublime.
Un acto convertido en esencia metafísica que traspasa cualquier otra manifestación de dolor, para vestirla con grandeza. Para darle ese valor sublime a la poesía, pero no porque la poesía exprese el sentimiento del dolor, sino que contenga el vació hacía donde es enviado el Ser ante la inminencia de su fin en la vida y el abismo que se abre.
Para comentar ese juego que va tomando en el poeta la certeza de su descubrimiento y que trasladado a su poesía, arremete con la valentía de la heredad guerrera de una tierra que necesita defenderse de la extrañeza, de lo extranjero: Ninguno, en efecto; el que lo hace no es un duelo grave. Lo hace poesía, que no es una gravedad, sino, de acuerdo con el mismo Díaz Mirón, una irreverencia. 354
Y la reflexión prosigue para adentrarse a los caminos donde Nietzsche repara de las condiciones dionisiacas para que ese arraigo se mantenga florido, sin pesar: Un duelo que canta, un duelo que goza, o bien, para decirlo paradójicamente, a la española, es un duelo que se goza como duelo. 354
Pero aquí, en el párrafo anterior, Cuesta recuerda más al espíritu de un pueblo al cual García Lorca le canta, pero de lo que se habla es de un proceso de arraigo y de la defensa de una tierra donde se asientan los valores de sus hombres y estos, como la vida humana se acontece en la tragedia.
Heredero de una tradición donde la separación de los ámbitos del cuerpo y el espíritu, se turnan para admitir sus necesidades, Díaz Mirón responde en su primera etapa de poeta, con la sonoridad del juego y la carcajada, para después en la medianía de la vida, asomarse a la veracidad de su finitud.
Esta complejidad humana, común, ya que pertenece a todos los individuos que llegan a sufrir la anagorisis de su existencia. Es reflejada en “Lascas”.
Es en la finitud abierta al escrutinio de una sensibilidad desaforada y al servicio de sus necesidades más inmediatas.
Ya que el abismo descubierto en la inminencia imaginaria de la muerte, es el vacío donde la creación escudriñara y encontrara el fundamento de su existencialidad.
Y a veces en esa percepción de abismo y que es la contemplación de la belleza, ya que en la tradición de occidente, la belleza cuando se le contempla cara a cara, afirma el acontecimiento de la muerte o lo que es lo mismo, se desafía a Dios previniendo lo que no tiene remedio ¿y esto, acaso no es un duelo?
Para pasar, no sin grandes azares, a desempeñar con su conciencia sometida a la razón de atreverse a una empresa, que ya en el pasado había dejado varado a los que la habían emprendido. Pero no falto de recursos la habita en la coraza de la forma, para la eliminación de las emociones a las que antes se encontraba dominado y servía.
Hay de las veces y tal vez en Díaz Mirón, que aconteció el verse descubierto por los otros, aquellos a los que elimino, no por el olvido sino en la vida real, y que le sirvieron de adiestramiento para admitir, que sólo hay una diferencia de grado para la aproximación a la experiencia de la muerte, esto es, entre la nuestra y la que conocemos de ellos.
Y esa diferencia también se puede encontrar en la poesía y el duelo entre dos personas y el duelo por la muerte del amigo o de la familia.
El duelo representa un enfrentamiento cruel y una apertura al resquicio, que alimenta la sublevación de la vida ante la inminencia de la muerte, para aumentar la indagación y la búsqueda de consuelo y salvación, pero también, de formas artificiales que se mantengan en el tiempo y representen al Ser, de quien como individuo tiene un límite biológico.
Pero hay que atender a esa apertura lograda por los otros en la conciencia de la finitud, que no se da sin una apertura a las esencias más metafísicas, que a los instintos o las emociones pasajeras.
Las cuitas de este mundo pasan a ser olvidadas, para pensar en esa posibilidad real de la muerte, ya sin las consecuencias prometidas por la consolación universal de su ilusión, el desasosiego y el ansia logran carcomer el arraigo y proponer en la misma conciencia la solución.
Porque en la poesía de emoción, la posibilidad real pasa a ser desmentida, a vivirse en la ilusión de una lejanía. Ajena. Díaz Mirón admitió en su poesía ceñirse a la trascendencia por una posibilidad: la razón creadora.
Y de ahí conminarse a una certeza abismal: la muerte es sólo un apuro lingüístico, que se soluciona con la forma, ya que esta, nunca muere, es infinita, a diferencia de los contenidos, que fenecen con las épocas y los años.


4. La otra crítica

Hay otros acercamientos a la poesía de Salvador Díaz Mirón, donde la tragedia no aparece con la certidumbre, que lo hace en el ensayo de Cuesta.
Es en esa otra mirada a veces amable a una poesía, que logra en su momento eliminar de sus ámbitos el arraigo por el uso de la racionalidad y acomete el peligro de pasar desapercibida para sus contemporáneos por no representar el espíritu de la época.
Es la contraparte de lo que López Velarde apunta con su poesía nostálgica y sedentaria, de contrastes entre la provincia vestida de blanco y la capital de los colores de la perversión, cantándole a la inocencia y a la perversión, pero desde la inocencia de los valores nacionales.
Díaz Mirón no propone otra cosa que la forma, no admite poner a la poesía al servicio de ideologías o banderas, su patria es la belleza. Y sólo a ella sirve, auque sea la más traicionera de las identidades a que puedes someterse el ser humano, ya que su tiempo, es puro y sin pasado o futuro, es el instante de la contemplación.
Es a esa belleza sin objeto o finalidad a la que Díaz mirón compromete su destino, tanto poético como personal, ya que su facilidad para obtener el contenido de la emoción, sólo es utilizada en platicas de café o de cantina a las que se dedica los últimos años de su vida.
El poeta se somete al más duro escrutinio: el tiempo.


Encallamos.

Soy biógrafo del ojo
al tercer día resucito como sastre.
Y enhebro en las líneas de la mano
esta historia de aplauso y vano día.

Encallamos siempre.
ensimismados) la gruta al día siguiente es oscura.

fui un biógrafo del ojo
y encontré la fantasía de la mirada
fui biógrafo del ojo
en el día de tu resurrección

fui biógrafo del día
historiador del ojo
y novelista de la mano

y cuando estoy más oscuro
encallo en ti
diminuta piedra al mediodía
como un padre amante de los días
como un luto al borde del camino…

encalla el día
soy naufragio del tiempo
en los líquenes del decir
pleno de mí —como un hugh grant flamante, como un bmw de la agonía— escribo, perdón, estorbo en esta esquina alumbrada del día…
día. Ser, opción. La escritura encalla. Encalla la escritura, la operación. Ensimismada al mediodía.

Toda la escritura opacidad del lenguaje
Todo alumbramiento ahoga
Todo desvelo es lo otro lo ensimismado. Lo mismo en esta operación tenue del silencio.. como un atroz espejo..
A diferencia de otros días hoy encalla la memoria. Sí, el oído.
Porque todo lo que escucha lo indistingue en un ruido masivo..
La ópera, la cantidad lunar,
La operación misma del lenguaje.
Ya nada canta.
Todo opera.
Ya nada cree en sí mismo
Sino encalla
Porque todo lo que encalla
Nos revela
Una esencia propia del lenguaje
Todo lo que encalla “muestra” es
Sangre superior y biología
Instinto, piedra y tesitura
Música vocal
..
toda piedra es la mentira
de un golpe y una huella
la relación de los días en que estuve
con este yo
la relación, la escritura,
la misma infancia de los días.
Porque la escritura es una infancia. Es una ráfaga tibia de minutos. Una exposición sumaria, un deseo. Un desértico sonar en ultratumbos. Un dejarse caer, sin reparar, en el ritmo propio del sonido. Toda escritura es la tortura ciega del amante. Toda escritura ahoga, patea y pide, como el crimen legañoso, el vocinglerío humeante y el pasado.
No estoy aquí. Estoy allá.
No soy yo. Sino el sonido.
Más una huella en un lugar del bosque.
Más un sentido que incendia las palabras
Más carbones y tatuajes que iluminan.
Este incendio carnal de la escritura.
Porque todo, todo, todo ya brota.
De un mismo lago, un mismo cielo, un sonido.
Una simple oscuridad, una atadura
Que lo mismo escribe y desata los instintos.
Que irrumpe silenciosa el desatino.
;Más si osare, lo has dicho, una extraña escritura
profanar la huella del lenguaje.
Más si osare, lo has dicho, perdonar,
Y aquí, se escribe para el silencio.

El juego de un niño —no lo sé—
es la pestilencia del adulto;
danza sin apariencia
cae de su carruaje.
Escucha. De nuevo. El sentido.

El juego de un niño, como un dios ciego,
es una patada en el culo de la almohada, o un navegar en el mar de la cama porque todo encalla
y no hay entropía ni verbo positivo que lo encauce
como el río
ese otro río de miradas
ese otro río de la memoria
ese otro río de fuego
que lentamente consume el futuro universo.

Fui vela encendida
Tea oscura
Fui barco de vapor
Canción de cuna
Chanson d´amour et reves jolies
Fui soplo
Huracán
Botanero
Chela al dos por uno
Y rola de sinfonola.
“Fui Gavilán, Luego Paloma,
Pobre tonto, ingenuo charlatán”
¡Qué mejor definición!
La nunca dada
¡Qué mejor día!
Que el futuro.
No enturbiemos más las aguas del lenguaje con el truco barato del porvenir.
No enturbiemos más la escritura con el Wall Mart del poema.
Sección de lácteos: las vanguardias.
Sección de frutas: el romanticismo.
Sección de blancos: la poesía roja de la nota rosa.

Y aquella que mataron era virgen
Y aquella que puteraron era santa
Y aquella que enlutece sin sentido
es la puta siendo puta inemputable…

(( El crítico disipa la emoción con su flashback terminológico. Perdón, quise decir su aparato crítico dominante, sus lexemas de bolsillo y sus fléxometros verbales. Ah, pero falta el hermeneuta en su búsqueda de arraigos, el profeta del sentido, que se siente más pop star que Luis Miguel en el Metropolitan Opera House))))
….

Y yo encallé en un futuro más próximo
Y cercano..
Y el tú barato y exquisito y el yo sensual y polifemo
La música del yo es su epopeya
La música del tú es un barrunto
Pero el pueblo unido en el nosotros / registra/
O que lírico social me has salido
Con tu hugh grant poeta de bolsillo,
De bolillo, sí…
… poesía de tortilla y pepsi de lata

Y hay que descubrir el largo parentesco de las cosas
Porque el corcho es azul y glamouroso
mientras el vientre de mi madre es amainado
Porque el teléfono se paga cada mes y los cheques vienen endosados
¿Por que el primo del poema es el boletín y la hija de la epopeya es la injuria?
Ante un día tan breve —como estos treinta años pasajeros— no sé si cerrar los ojos de sorpresa o dormitar en la banca, en el sofá o en la penuria aérea de los días.
….
No hay más poema que la esquina polvosa de mi cuarto





miércoles, mayo 05, 2004

........
La estructura es el en sí

como la flor

la llaga.



Que devora la tipografía.

Insisto

Esta violencia

Es la otra

La cara

Que se oculta.





Aquellos que bajaron al fondo

De una gruta más pura

Encontraron cieno.



Un fango (nos oscurece)





El encantamiento

Nos repugna.



Atascados en el fango

Pedaleamos

Pero el mar es profundo

Y

Ya.



En el ya del acá cerquita

En el pulcro y demolido en sí.

No hay otra cosa

Voltear (ya)

Saltan el pentagrama

Las ovejas

Que escapan

Del salmo.



El en sí

Es mayúsculo

Como el día

O la orilla del en sí

Es fangosa

Me rindo..



Ya todo en sí es

Una orilla.

litoral de un tiempo



La estructura del en sí

Es una pifia.

Mejor bañemos la dona en chocolate.



El en sí quebranta la música del día

El arpista nos seduce.



A las cosas hay que llamarlas por su nombre

Al en sí perro

Al perro en sí

Nocturno

A la levadura daga o servilleta

Al precio del en sí

Jamás.



Un en sí

Es un jamás

Un juicio

El en sí no tiene a prioris

Es un fonema

Maldito

varado

y sin lujo de detalles.





El en sí austero

El en sí del “El”

El en sí del “austero en sí”

Elensídelausteroensí

-ya sin comillas

el en sí ensimismado

El en sí.





El radical en sí

No tiene estructura

La estructura del “tiene”

Es un en sí

Un párrafo



Vuelan los pájaros al en sí

Como aves de un mundo real.

La quimera es la no-escritura del en sí.



Ya van dos días encerrados



En sí en sí

Que es el en sí

El en sí no duele

Incomoda

El en sí elensiarta

Fue el arjé

En el sí el en sí creemos..





Qué es el en sí?

El en sí es la raíz

Qué esencia del en sí?

El en sí del “qué” es el futuro donde del “en sí”

Pero si avanzamos

Olvidamos el pasado del “En sí”

Su “dónde” es

El en sí

Es un en sí

pero el donde del futuro

su trama?



Y como se apaga el en si

Vino el bombero

Apagar el en si

Es plantar el árbol

No el pecado.

Summus ens

Ya ja ja

En si

Isnele…





Porque cada piedra

es un precipicio

y cada en sí la llaga dura

un principio del en sí

es el fin de la estructura del en sí.



Fin del en sí

Principio del fuera sí

Y el fuera no

Del en sí

Y el fin del principio

Finaliza un principio

Principia un fin

Un en sí

Para ti

Tara Pi

En el sí..



Toda sombra del en sí

Es la luz del en mí

Ensombrece el fuera sí

La luz del en sí.





sábado, mayo 01, 2004

La fractura de Cioran
por Omar Castro Hernández

Sea este otro intento solicitado de abordar la escritura de biowriting, un intento amenazado la soledad y los aforismos de Cioran se convierte en un reto que pensé no iba a tomar. laultima@hotmail.com solicitó un prólogo no lamentaciones de una víctima más de Cioran ni tampoco una narrativa sobre los insomnios que provoca escribir.
Me referiré sólo a una historia para plantear la dinámica de especulaciones que supongo al lector serán de interés. Definitivamente el lector poco a poco encontrara en las líneas la intención de consumar un atentado contra Cioran. El objetivo no es derrotarlo es ir más allá. El autor de estos cuentos no es motivado por el nihilismo que demuestra que la tristeza estúpida o lúcida (según quien la defina: Cioran o la sociedad) de Cioran no tiene importancia sino la oportunidad que laultima@hotmail.com encuentra para ir "más allá" de esa propuesta.
Me referiré a un sólo cuento para no enfrentar al lector a la personalidad que poseen personajes con la capacidad de entender que su vida está más allá que una cita de Cioran o de ilusionarse a través de otra persona (o quiso escribir personaje) por medio de la comparación de la heroína y el sexo; donde evidentemente gana la heroína.
En base a ejemplos inconexos y fragmentados el autor busca demostrar que la comodidad esta más allá del nihilismo: Sentarse feliz a escribir en el Messenger, siempre y cuando, la versión nueva esté instalada; ante la película "Transpointing" o en la decepción cómoda de Cioran. Es el argumento que Mario impone a la escritura de los cuentos para mostrar una posible refutación a los aforismos de Cioran que se resumen en la palabra, como lo escribe el nihilista, "Mierda".

Mario siempre busca poner a dudar a su lector escribe sobre personajes posibles que a simple vista son irreales por hechos tan sencillos como asumir proyectos de fin de año olvidados sistemáticamente. ¿Acaso imaginan un personaje capaz de recordar un cuento o de referenciar algún personaje con la capacidad de recibir con mesura la analogía entre un reloj y un hámster? Digamos que gusta de la hiper realidad.

La propuesta es sin duda una hiper realidad que colinda con la ficción. Me atrevería a afirmar que existe la intención de una biografía y declarar lo real maravilloso como argumento para retar a la filosofía.

Su iconografía de marcas dedicadas al comprador compulsivo no discriminan al propietario de una HP ni mucho menos al consumidor contumaz de cine norteamericano. Su escritura usa la marca como metáfora, ejemplo o modelo. Disimula tras la marca al poeta. Descubre en la vivencia del útil la síntesis de miles de sensaciones. El nombre de una película implica las vivencias que el lector pudo acumular cuando fue espectador de cine. Una marca es un hipervínculo que lleva a otra. Le interesa el nombre del autor como moda o marca, como fenómeno social.

La estrategia del autor es ocultar para disuadir a través de un discurso que se basa en las connotaciones que expresan las marcas de una moda determinada. Las frases tienen un valor y contenido de acuerdo a la jerarquía que ocupa en la moda determinada marca, por ejemplo: Coca Cola y Big Cola tienen diverso valor connotativo en una frase. Esto quizá obedezca a la intención de contextualizar históricamente lo que realiza en el acto de la escritura pero también es un aspecto criticable puesto que ocupa marcas como siglas para comunicar en forma rápida emulando la intención del artículo periodístico: esto admite en la intención una apuesta al futuro. ¿Qué sucederá cuando el titulo de “Traspointig” sea multiplicado gracias a la estandarización o cuando se modifique el contenido de un producto, o cuando la popularidad de Cioran decaiga? Es una apuesta a la evolución del lector. A un lector que estará consciente de la historia de un producto y entenderá que la imagen y el contenido cambia con el paso del tiempo, y que las modas se transforman. Se podría también pensar que apuesta a favor del entendimiento inmediato, de la comunicación de la idea en el momento no a posteriori. Mario no espera a los lectores del futuro para ser entendido, se aproxima a los que están en su ahora. Descarta con ello al lector con reumatismos propios del intelectual desinteresado por la moda; descarta al que no conoce la marca o la moda; pero se convierte en reto para quien ve en las marcas variables matemáticas que influyen en el contenido del texto. En ese sentido son textos que discriminan a los intelectuales por sus temas específicos, pero es también una exigencia donde el intelectual tendrá por fuerza que usar una HP para saber el sentido de una metafora. Es la muestra que el hermetismo es propio de la moda también. Pero esto son implicaciones que me enfrentan al leer el cuento de Mario. Y como sólo es un prólogo detengo aquí las especulaciones que seguramente un lector habido por conocer el contenido brincará sin problemas… como sucede en Rayuela de Julio Cortazar.

hola

Hola. Vamos a hablar del cuadro de oposición.